jueves, 21 de marzo de 2013

VOTA, REVOTA Y EN TU CULO EXPLOTA

    Sé (y espero) que a muchos os habrá llamado la atención el doble ¡error ortográfico? del título de la entrada. Supongo que las reacciones al mismo serán de lo más variadas; sorpresa, hilaridad, indignación ante la ignorancia del autor, simplemente indiferencia, o que sé yo cuantas más (empezar nuevo post divagando después de tanto tiempo sin entrar en el blog es lo mejor para captar vuestra atención de nuevo, soy un genio de las redes sociales, lo sé). Los pocos que no hayáis notado nada y todos los de la Logse sois los que hubieseis acertado si a la pregunta "¿veis alguna falta de ortografía en el título de esta entrada?" os encogieseis de hombros y contestaseis "Nooop". ¡¡¡Enhorabuena!!!

    Reconozco que estoy un poco disperso, lo normal después de tanto tiempo sin aporrear teclitas, pero como es posible que todavía quede alguien leyendo a estas alturas de disertación absurda intentaré ir al grano. Si soy capaz de encontrarlo, no desesperéis. 

    Recordaba el otro día mientras veía con atención las noticias entre bostezo y suspiro, aquellas trascendentes y épicas disputas infantiles en las que defendíamos nuestro pequeño ego malherido con el clásico "y tú más" ante el lacerante insulto provocador del compañero que no contento con robarte la canica, se reía y provocaba nuestra ira al recriminarle su actitud y exigirle la devolución de la posesión tan vilmente afanada. Esa respuesta al insulto, era desafiante y altiva y debía de servir para terminar con el conflicto por lo que resultaba incomprensible que lejos de huir con el rabo entre las piernas nuestro rival respondiese con la contundente expresión "me bota y en tu culo explota". Los niños normales, ante la magnitud e intensidad del argumento se daban por vencidos pero en ese momento era cuando surgíamos los niños especiales, dotados con una impresionante capacidad de réplica innata y respondíamos " pues a mí me bota, me rebota y en el tuyo explota". Chúpate esa, impúber ordinario, el desafío estaba ganado, pero la canica no la devolvía el muy....

    A estas alturas la mayor parte de vosotros, al menos de los que hubieseis fallado la pregunta inicial, habréis adivinado que tan evocador recuerdo me vino dado por una de las múltiples disputas de gran nivel que a diario se producen en nuestro infravalorado Parlamento. En este caso creo que se trataba de un duelo de Sorayas pero podría ser cualquier otro. Dejando al margen momentáneamente la elevada cota de dialéctica política, ¿algún periodista en la sala que pueda explicar qué tiene de interesante rescatar esas peleas ridículas en los informativos? ¿de verdad es lo más reseñable que pasa en el Parlamento? ¿Nadie explica nada allí o alguien decide que no nos importa y que lo único que queremos es sangre?¿Realmente será cierto que lo que queremos es ver como se echan mierda los unos a los otros? ¿No nos interesa saber como describen los problemas y que soluciones les dan? ¿Votamos en función de quien tiene más capacidad para dejar en evidencia al adversario? ¿Solo hay dos opciones y son esas las únicas opciones que hay para la inmensa mayoría de medios de comunicación? ¿Cree la mayor parte de la población que la política es un combate de boxeo dialéctico entre dos, y solo dos, adversarios? Si es así la próxima vez que toque ir a las urnas ya sabéis "Vota, revota y en nuestro culo explota"

    

1 comentario:

  1. El problema del bipartidismo es una epidemia con los días contados si miramos a nuestro alrededor (en Grecia por ejemplo).

    Es una pena que escasa población conozca brillantes intervenciones en el parlamento como las de Sabino Cuadra, que por cierto, cuando habla, ya no queda ningún politicucho en su sillón porque lo dejan para el final. Él sí que propone y dice verdades, aprovecha cada interveción. Ahí va una de las últimas sobre bipartidismo precisamente:
    http://www.youtube.com/watch?v=G5Ko4w5B-vs

    Y a seguir desempolvando y escribiendo!

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