-“No volverá a pasar, nunca volveré a tomar un ácido, solo limón en la ginebra”, sonrió.
El resto de componentes no estaban del todo convencidos pero a fin de cuentas, si habían conseguido llegar lejos y ser una banda valorada era en gran medida gracias a él, así que merecía que le dieran la oportunidad de participar en la nueva gira.
Apoyado contra la ventana, esperaba nervioso comprobando el reloj y se encendía un canuto de hierba mientras agradecía a Roger la confianza. Soñaba con interpretar “Jugband blues” a su lado y con volver a recibir los aplausos y el calor del público.
La última colilla se apagaba junto a las dos anteriores; su madre salió a la puerta de la vivienda. Miró hacia ella y dijo:
-“No van a venir, ¿verdad mamá?”.
–“No cariño, no vendrán”, contestó pasándole la mano por el hombro.
Syd subió a su cuarto y se encerró en él para siempre.
Cachis... Si hubiese bebido gaseosa.
ResponderEliminarResulta que yo he sido músico, y JAMÁS HE SUBIDO A UN ESCENARIO HABIENDO TOMADO ALCOHOL (salvo si había cenado antes, que lo bebes...) Y procurábamos cenar después, porque de tanto despendolarme por el escenario podía vomitar...
Era mi trabajo. Yo voy a mi trabajo pasado de alcohol. Los fans pagan, hay que respetarlos.
Saludos, Q minor.
O sea, quiero decir que NO VOY PASADO DE ALCOHOL.... jajajaja
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